6 consejos para estudiar de forma inteligente
6 consejos para estudiar de forma inteligente
El éxito académico es una de las principales preocupaciones durante la etapa escolar y universitaria y no depende únicamente de la cantidad de horas que dedicamos al estudio, sino de la motivación, la concentración o los hábitos de estudio.
Los estudiantes necesitan aprender técnicas de estudio específicas para organizar, recordar, priorizar y cambiar los enfoques de estudio con flexibilidad. Estos procesos apoyan las estrategias de aprendizaje y son esenciales para un estudio eficiente.
Aquí os dejamos algunos consejos para mejorar vuestras técnicas de estudio y sacar todo vuestro potencial.
Emplea la técnica Pomodoro
La técnica pomodoro usa un reloj para dividir el tiempo dedicado a un trabajo en intervalos de 25 minutos -llamados 'pomodoros'- separados por pequeñas pausas. Esta técnica te ayudara a mejorar tu productividad.
Aprende diferentes técnicas de lectura:
skimming y scanning.
El skimming y el scanning son dos técnicas de lectura que permiten coger grandes cantidades de texto y abordar su contenido sin tener que ir línea por línea.
· Skimming: consiste en leer la primera línea de cada párrafo, únicamente. Al terminar, aunque no tendremos un conocimiento exacto del contenido del texto nos habremos creado un esquema mental de cómo está dispuesta la información y cómo podemos abordarla para su aprendizaje.
· Scanning: el scanning consiste en coger varias palabras clave e irlas buscando mientras se realiza una lectura rápida. Identifica las 3 palabras clave y escanea el texto en busca de las mismas. Cada vez que la veas, subraya.
Explícaselo a tu abuela
La mejor manera de saber si lo hemos entendido realmente es tratar de explicarlo de manera sencilla y clara. Ponte de pie y da una breve clase de lo que estés estudiando para reforzar el conocimiento e identificar qué partes no acabas de tener del todo claras.
Entiende cómo funciona la memoria
Los patrones y modelos repetitivos son un buen método para fijar las cosas en la memoria. Inventa una pequeña historia o regla nmemotécnica con aquello que quieras aprender. Sólo hay que coger los conceptos clave y crear un pequeño cuento o breve argumento con ellos, da igual lo absurdo que sea. Ponerlos en orden y relacionarlos es lo que hace que se activen las áreas específicas del cerebro relacionadas con la memoria.
Practica lo que aprendes
Una manera de aprender y memorizar casi sin darse cuenta es realizar cualquier tipo de actividad práctica relacionada. Hacer redacciones, resolver problemas, esquematizar u ordenar términos en orden alfabético son procesos que ayudan tanto a la memorización como a la relación de conceptos, al aprender.
Descansa
Mientras duermes el cerebro se pone a trabajar como loco y a relacionar aleatoriamente conceptos, ideas y teorías. Por ello, es bueno hacer un breve repaso de lo aprendido cinco minutos antes de irse a la cama. Es extremadamente curioso lo bien que funciona.
Autora: Laura Romero Arnedo
Publicado en Escuela de Padres Irco